En pleno estado de alarma y con el toque de queda a las ocho de la noche, un BMW negro, circulaba, sobre las dos de la mañana, con total impunidad por la carretera nacional 234, hasta llegar a Abejar a la estación de servicio, conocida como la gasolinera, La Pausa de Pinares.
Tres personas forzaron la puerta de acceso al interior de la estación y consiguieron sustraer dinero y tabaco de la maquina expendedora., así como de la conocida como tragaperras. También se llevaron material de telefonía móvil de una de las estanterías del servicio.
"Estuvimos a punto de pillarles", comenta Rubén, quien ya estuvo en el sitio a los pocos minutos del aviso, "y se acababan de marchar". Para él se trataba de un grupo que va dando golpes a distintos establecimientos por distintas zonas, que luego descansan, y retoman cuando creen oportuno.
Desde el establecimiento tienen claro que los autores del hurto "ya sabían a lo que venían", y lo hicieron en pocos minutos, antes de que hiciera su efecto el aviso por la alarma.
Precisamente, La Pausa había estado cerrada durante estos quince días, y reabrirá sus puertas, cumpliendo con la normativa y exigencias de las restricciones y el estado de alarma, de siete de la mañana a cuatro de la tarde.