Esther Mateo Gómez se reúne en esta jornada del martes 22 de agosto con sus familiares y vecinos de la localidad de Valdeavellano de Tera, en El Valle de Soria, por el motivo de su 100 cumpleaños.
En la iglesia del municipio se ha hecho entrega de la placa conmemorativa por parte de Laura Prieto, en representación de la Diputación Provincial de Soria, a la homenajeada. Además de recibir todo el cariño y felicitaciones del Ayuntamiento de Valdeavellano y de todos sus vecinos.
Un 22 de agosto de 1923 nacía Esther Mateo Gómez, hija de Ventura y M.ª Ángeles, en Valdeavellano de Tera.
Junto con sus siete hermanos, siendo ella la quinta,, Esther fue a la escuela de Valdeavellano de Tera hasta los 14 años para posteriormente ir a la capital soriana a formarse como enfermera.
Esta profesión le acompañaría durante gran parte de su vida, ejerciendo durante más de 15 años en el actual Albergue Juvenil o “Casa de los Indianos”, cuando se acondicionó como preventivo después de la Guerra Civil, donde atendió a niños y niñas de toda la zona. Los 20 años siguientes Esther continuó realizando trabajos de administración y gestión dentro del propio Centro.
Gracias a su gran memoria, simpatía y cariño, Esther cuenta con una muy buena salud pudiendo así disfrutar de su pueblo y vecinos cada verano. Cuenta con una gran afición a la lectura y a la realización de manualidades que hace mantenerse siempre activa y feliz.
Al igual que antes, sigue siendo una mujer dispuesta a participar en la vida de Valdeavellano de Tera y colaborar con la iglesia de la localidad.
En este día especial de su cumpleaños, y en la Iglesia de Nuestra Señora de la Paz, José Antonio García Izquierdo, su querido sobrino sacerdote, ha ofrecido una misa en honor al centenario de Esther.
Ha sido celebración por todo lo alto donde todos sus familiares y vecinos se han reunido para pasar el día de junto a su querida amiga y vecina.