Madres y Padres de Covaleda, y de distintos pueblos de la provincia, han comenzado una movilización ante el anuncio realizado hace escasas semanas por parte de la Dirección Provincial de Educación de Soria de la implantación del servicio de la línea fría en los comedores escolares de las localidades de Covaleda, Quintana Redonda y Gómara.
Una representación de padres y madres de 18 centros educativos sorianos ha iniciado recientemente una ronda de reuniones con el fin de llevar a cabo las movilizaciones oportunas para evitar la implantación de dicho servicio en los comedores escolares.
Con posterioridad al inicio de estas reuniones, la Dirección Provincial ha anunciado a estos centros y a la opinión pública su intención de “paralizar” por el momento esta medida.
Coincidiendo con este anuncio, el director provincial de Educación, Javier Barrio, ha recibido esta semana a un grupo de madres y padres que pretendían recibir información de primera mano acerca de este proceso. El encuentro había sido solicitado con anterioridad por parte de miembros del colectivo.
Barrio ha transmitido a los presentes su intención de paralizar la implantación de la línea fría hasta después de las elecciones, y del consiguiente nombramiento del siguiente director provincial de Educación, y ha dejado patente que “el actual equipo no quiere tomar esta decisión” para señalar a continuación que es una medida que ya corresponde valorar a quien vaya a ostentar el cargo en un los próximos años.
Al finalizar la reunión, los padres y madres de los usuarios de los comedores escolares sorianos han coincidido en señalar su descontento y decepción con una actitud que califican de “preocupante e incierta”, en tanto que no será hasta bien entrado junio cuando se conozca quién relevará a Javier Barrio en su cargo, y qué intenciones albergará sobre la implantación.
Desde el colectivo que se ha movilizado “cuesta entender la retirada de un sistema que hasta ahora ha funcionado bien, y que consideramos que también cumple con los requisitos sanitarios, nutricionales y de calidad exigidos”.
Los padres y madres de los usuarios reclaman que se les tenga en cuenta a la hora de valorar la implantación o no de este método en los centros. La mayor parte de los pequeños realizan al cabo del año unas 200 comidas en los colegios.
Parte de los recelos que provoca el catering de línea fría entre las madres y padres se debe a que el sistema de cocinado se lleva a cabo en una bandeja de plástico, con la posible migración de partículas del plástico a los alimentos y sus consecuencias para la salud.
Por otro lado, los progenitores defienden y reclaman su derecho a participar y a opinar sobre la alimentación de sus hijos ya no como consumidores, sino básicamente como padres y madres, cuestionando que se les pretenda “enajenar” ese derecho.
En el transcurso de la reunión mantenida se le ha recordado Javier Barrio que en otras provincias se ha indicado que “no se impondrá la línea fría en aquellos centros que no lo deseen”, tal y como ha sido el caso del anuncio realizado por su homólogo en Burgos a principios de este mismo mes.
El director provincial de Educación en Soria ha reiterado su intención de no hipotecar el futuro de la persona que le releve en el cargo, por lo que evitará tomar cualquier decisión al respecto de la implantación de la línea fría a la vuelta de las vacaciones de verano.
Por todo esto, y ante la sensación de “incertidumbre” sobre lo que pueda pretender imponerse en un futuro próximo, los padres y madres de los usuarios sorianos quieren “dejar hechos sus deberes” antes de irse de vacaciones, y se desarrollará entre abril y mayo una campaña de recogida de firmas entre toda la ciudadanía, así como una ronda de reuniones con agentes socioeconómicos, con la finalidad de dejar patente que “no queremos quedar excluidos de toma de decisiones que afectan a la alimentación de nuestros hijos”.