La alcaldesa de Quintanar de la Sierra, Montserrat Ibáñez, y el difusor de la cultura de la morcilla en Burgos, Roberto Da Silva, han realizado este jueves en la sala cidiana de la Diputación de Burgos la presentación de la primera edición de la feria de la morcilla dulce que se vivierá en Quintanar de la Sierra los días 28 y 29 de marzo.
El programa arrancará a las 12 del mediodía del sábado 28 de marzo con la matanza del cerdo en la plaza, al que seguirá el pregón en el salón municipal y la apertura de la exposición de productos chacineros en el salón municipal. Durante la jornada, por el mediodía y la tarde, se disfrutar de las catas de morcillas, coordinadas por Roberto Da Silvia, de Morcillas Cardeña de Burgos.
El domingo 29 se llevará a cabo la cata de morcilla en maridaje con vinos de distinta procedencia. La muestra de productos permanecerá abierta al público en el salón municipal desde las 11 a las 14,30 horas.
Desde el viernes 27 hasta el domingo 29 de marzo se van a poder degustar las tapas que tienen como ingrediente a la morcilla dulce de Quintanar en distintos bares y restaurantes de la localidad. En esta edición se ha fijado un precio único de dos euros, que incluye la tapa y la bebida, sea vino, caña o agua. Entre quienes frecuenten los locales y rellenen las fichas se sortearan tres premios, con una sesión en el spa de la Posada Las Mayas, un lote de productos El Peñedo, y un circuito-aventura en el parque de tirolinas De Pino a Pino en Revenga.
Los organizadores de la Feria coinciden en destacar las ventajas de una iniciativa de estas características. La alcaldesa de Quintanar de la Sierra piensa que es una actividad que faltaba cuando la morcilla ha sido algo propio de Quintanar. Para Angel Antón, de productos El Peñedo, la morcilla tiene una gran aceptación en la comarca y forma parte de su costumbre alimenticia.
Desde el Centro de Iniciativas Turísticas Turismourbión se ve la feria como un punto más en el engranaje gastronómico de la comarca biprovincial de Burgos y Soria a fin de hacer atractivo el destino en una época del año en la que se reduce el número de visitantes, en un calendario que se está completando con el chorizo en Covaleda, el marzuelo en Navaleno, y la cecina en Quintanar.
El evento cuenta con la colaboración e implicación de la Diputación Provincial de Burgos, y a través de Burgos Alimenta, se quieren potenciar los alimentos que, desde la provincia, se están proyectando hacia el exterior.