El grupo socialista de la Diputación de Burgos propondrá mañana viernes en el pleno de la corporacción provincial por la que pide a la Junta de Castilla y León la retirada de la línea fría de catering en los comedores de los colegios.
La petición surge después de las movilizaciones de distintos colectivos. La última tuvo lugar el pasado 25 de noviembre, frente a la Dirección Provincial de Educación, y coincidiendo con la concentración en Valladolid.
Los padres del colegio de Huerta del Rey, integrado en el Centro Rural Agrupado La Demanda, han logrado que este curso no se implante el servicio de catering en el comedor escolar. Así lo confirmaba el pasado mes de octubre en la población pinariega el delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Burgos, Baudilio Felipe Fernández-Mardomingo Barriuso, quien decía no poder asegurar si esta medida se llegaba a adoptar en posteriores cursos.
El “logro” de los padres se ha conseguido tras semanas de protesta. Durante el mes de septiembre, retiraron a los hijos del comedor del colegio en señal de protesta, durante una jornada a la semana en lo que consideraban “la imposición de la Junta de una línea fría de caterin en el comedor del colegio”.
Rechazaban los padres que se llevara la comida cada tres días a los hijos, máxime “teniendo una magnifica cocina y personal atendiendo a los niños incluso con necesidades alimenticias especiales”, según recuerda Roberto Izquierdo, uno de los padres afectados .Se llegaron a recoger casi 500 firmas, y se mandó un escrito a la Junta, a la Dirección Provincial de Educación y al Ayuntamiento.
El Ayutamiento de Huerta de Rey ha estado del lado de los padres desde un primer momento. El apoyo ha llegado a más, comprometiéndose los responsables locales a asumir, por parte de la institución local, esa cantidad económica que podía ser excusa para la eliminar la cocina del comedor y sustituirla por el cátering por ahorro de dinero.
El propio alcalde, Antonio Muñoz, acompañó a los padres en la visita a la empresa Ausolan-Igmo para conocer sus instalaciones en Burgos . El domingo día 26 de octubre vivieron una jornada reivindicativa con un centenar de personas consistente en la realización de la comida entre todos en instalaciones municipales.
La protesta de los padres de Huerta es compartida por otras familias en colegios de la zona. Centros de Covarrubias y Aranda de Duero ya han mostrado su intención de participar en una Plataforma integrada por padres de varios centros, con interés también en el colegio de Salas de los Infantes.
Los padres quieren que la alimentación de los chavales sea lo más sana y completa posible, y para ello creen que es esencial tener una cocina en funcionamiento “donde se come como en casa”, como remarca Roberto Izquierdo, y en la que se atiende a 61 escolares. Izquierdo comenta que han insistido también para que se consuman productos adquiridos en la zona, ya que desde que no se hace de forma completa, se ha notado, en parte, el descenso de la calidad. Esta exigencia choca con la imposibilidad de la administración de fijar las compras en los lugares cercanos, que puede suponer una discriminación para quienes pujen por el servicio de alimentos.
