Cerca de un millar de personas, entre ellas profesionales de la hostelería de la provincia de Soria se han concentrado este viernes 6 de noviembre ante la Delegación Territorial de la Junta para recordar a las administraciones públicas que tienen "abandonado" al sector hostelero y turístico y reclamar medidas y ayudas urgentes, para evitar la ruina total del sector.
En la concentración han participado hosteleros y restauradores de la comarca, entre ellos el durolense Luis Alberto Simón, quien ha mostrado su convicción con estos actos de protesta en "los que había que estar".
Convocados por la Asociación de Hostelería y Turismo de Soria (Asohtur) los manifestantes, muchos hosteleros y otros tantos de otros sectores asociados, recrearon un funeral para evidenciar que el sector económico "principal" en España no puede ser el pagano de la crisis sanitaria.
El presidente de Asohtur, Pablo Cabezón, ha confirmado que muchos hosteleros tendrán que volverse a hipotecar, otros viven con 300 euros al mes, y agregó que tras, este nuevo cierre obligado, un 30 por ciento echará el cierre definitivo.
A pesar de ello, Cabezón ha ensalzado el carácter vocacional de los profesionales del sector, que apostarán por volver a abrir otro negocio, toda vez que la pandemia pase, ya que "no saben vivir de otra cosa que no sea dar servicio, atención y cuidar a la gente".
La concentración no sólo fue secundaria por los hosteleros sino que los panaderos, repartidores de bebidas, instaladores de sonido y pescaderos, que dependen del sector de la hostelería para vivir respaldaron la convocatoria, ya que "están abocados al fracaso o a una bajada de su facturación importante". "La hostelería y el sector turística en España es una cadena y si caemos nosotros caen muchos más detrás", advirtió.
Ayudas municipales
Pablo Cabezón criticó también el hecho de que el día que se manifiestan el Ayuntamiento de Soria aproveche para anunciar que implantará medidas en beneficio del sector hostelero. "Han tenido muchos días para anunciar la ayuda y no puede ser que el día que nos manifestemos anuncien que nos respaldan. ¿Tienen que vernos en una situación crítica para ponerse a trabajar?", preguntó, para alentar a todas las administraciones a apoyar de forma inmediata a los hosteleros.
Al respecto, puso de ejemplo a la Comunidad autónoma de Galicia, cuyo presidente aprobó medidas de ayuda al sector antes de plantear el cierre. "No pueden plantear una medida de cierre, antes que las de ayuda. A la gente le tienen que dar una alternativa antes de prohibirle que trabaje. Lo que están haciendo es ilegal porque me prohíben un derecho. Nos expropian el negocio sin ayudas inmediatas", dijo, para asegurar, después, que los abogados de muchos hosteleros les invitan a denunciar y conseguir una indemnización por obligar a cerrar su negocio.
Por otro lado, precisó que la Junta no ha pagado la ayuda compensatoria de los ERTE y hay gente del sector que vive con 300 o 500 euros al mes, y criticó que el Gobierno de España apruebe la subida del sueldo de los funcionarios para subirse el suyo propio. "A los que hay que subir el sueldo es a los sanitarios. Creo que no es momento de subir el sueldo a los funcionarios para subírselo ellos mismos", destacó.
En su opinión, el sector hostelero y turístico en España es el que sustenta la economía, y agregó que en todas las crisis económicas ha sido ese el ha sacado al país adelante y ha creado empleo.
El portavoz de la Asociación aseguró que algunos hosteleros de Soria " se intentan reinventar" con el servicio de comida a domicilio pero, criticó, el hecho de que se mande a 15.000 familias de Soria a casa sin ningún tipo de ayuda".
En este sentido, aseguró que la hostelería hace una labor social "enorme" y los contagios que se han producido en Soria no se han producido en bares y restaurantes.
En su opinión, los políticos de España no han sabido adoptar las medidas adecuadas en siete meses, y recordó que es necesario que las ayudas les lleguen ya no sólo para mantener el negocio abierto sino para que las familias que viven del sector puedan comer. "Nos dicen que pidamos créditos, que los pidan ellos", espetó refiriéndose a la clase política.
En lo que respecta a un futuro próximo, Pablo Cabezón avanzó que la Junta de Castilla y León aplicará otras medidas más restrictivas en 15 días, que afectarán al comercio y posteriormente se llegará al confinamiento domiciliario, lo que supondrá "la ruina total del sector servicios".
En este aspecto, aprovechó para cargar contra el Estado autonómico, y consideró que las medidas frente al COVID-19 y las restricciones deben ser para toda España, ya que de nada sirve que en Soria los bares estén cerrados y en Madrid abiertos.
Además, recalcó que es absurdo que ahora la Junta invierta en cuestiones como el arreglo de viviendas en el medio rural, cuando están arruinando la vida de los sorianos que viven en su tierra. "Ponen luces de Navidad, ¿para quién? Si nadie va a tener ganas de celebrar estas fiestas y gastar".
Es por ello, que cargó contra la clase política que prohíbe que la sociedad se relaciona pero luego acude a la fiesta del periódico 'El español' en comandita.