28 integrantes del Regimiento de Campaña 11 del Ejército con base militar en Castrillo del Val (Burgos) han realizado durante estos días diferentes maniobras en el monte de Canicosa de la Sierra.
La zona de Revenga se ha convertido así en un improvisado hogar para estos militares. Tiendas de campaña y varios vehículos han sido algunos de los elementos que han formado parte del despliegue que ha llevado a cabo esta compañía en Pinares.
Además, durante estos días han tenido que enfrentarse a diferentes trabajos de entrenamiento con el objetivo de mejorar la forma física, acumular experiencia y poner en práctica los conocimientos adquiridos. Los componentes han practicado el denominado 'Ejercicio Alf.' conocido como "el combatiente general.
Durante las maniobras, han realizado marchas a distintas horas, incluidas las nocturnas, y han cerrado la estancia con una exhibición de las nuevas tecnologías a diferentes grupos de vecinos de Canicosa, desde los más mayores, al colectivo de mujeres y los chavales, que han querido conocer más sobre el Ejército.
El Capitán Juan Antonio Viruel, ha destacado la idoneidad de los montes de esta zona para las prácticas, y la oportunidad de "acercar" la labor del Ejército a la sociedad civil.
Para el alcalde de Canicosa, Ramiro Ibáñez, es notoria la simbiosis entre los militares y los vecinos, "y algunos de ellos es la primera vez que veían a miembros del Ejército. Viruel ha agradecido la acogida de Canicosa, y el primer edil ha dado las gracias por la labor desplegada durante estos días.