Si el pasado 7 de septiembre volvían los niños a las escuelas de pinares, el lunes 14 lo hacían los alumnos de educación secundaria. Ataviados con sus mascarillas y guardando estrictamente las distancias de seguridad, regresaban los alumnos al I.E.S “Tierra de Alvar González de Quintanar de la Sierra. La expectación, los nervios y la incertidumbre fueron máximas después de volver a las clases presenciales tras el decreto de alarma del mes de marzo. Y es que los alumnos de secundaria, al igual que los de los colegios y los universitarios, viven una situación inédita desde entonces.
Ahora el protocolo aprobado por la Junta y consensuado con el gobierno central obliga a los alumnos al uso de la mascarilla ya sean higiénicas o reutilizables si están certificadas. Mantener la distancia social y lavarse las manos con frecuencia también son pautas esenciales para evitar los contagios en el Instituto de educación secundaria de la localidad pinariega .Además, el centro limpia y ventila las aulas a lo largo de la jornada escolar. “Venimos trabajando de forma muy intensa en estas medidas desde el mes de julio. Todos los que formamos parte de la plantilla del I.E.S Tierra de Alvar González hemos hecho un esfuerzo extra para aprender cómo poner en marcha todas las medidas sanitarias y así aplicar correctamente el protocolo establecido”.
Dentro del mismo juega un papel clave el Coordinador Covid. Es la persona que avisa si hay sospechas de algún positivo. Si fuera así, a esa persona se le aisla en un espacio ventilado y se llama a la dirección provincial. El alumno, lógicamente, debería abandonar el centro. Además, hay que destacar que los pueblos y en este caso Quintanar tienen ratios de alumnos bajos. Eso permite aplicar de forma más sencilla y segura todas las medidas sanitarias y de higiene para luchar contra el Covid 19”, destaca María José Martínez Martínez. Quintanar de la Sierra además ha puesto en marcha las aulas de referencia. Con este sistema se busca fundamentalmente que los alumnos permanezcan el mayor tiempo posible en ellas. Eso implica necesariamente que sean los profesores los que tengan que desplazarse a las mismas. Por lo tanto se evita en gran parte la posibilidad de contacto siendo una gran medida para luchar contra el Covid 19. “Confío en el trabajo bien hecho y confío en la gran profesionalidad de todos los profesores del instituto”.
“Afortundadamente vamos a poder contar con toda la plantilla. Un factor que va a ser realmente importante para luchar contra una situación inédita”. “En este sentido, si quiero expresar mi gratitud y mi orgullo por contar con un personal cualificado y profesional que ha estado a la altura antes de empezar el curso y que va a estar a la altura en los próximos meses”. “En el fondo, el regreso a las aulas era algo más que necesario porque los alumnos necesitan aprender en contacto con sus amigos, compañeros y profesores. Las clases a distancia pueden ayudar en la educación de los chavales, pero no tienen nada que ver con las clases presenciales”. “Si quiero aprovechar para defender y poner en valor la enorme calidad de enseñanza que reciben los alumnos de todos los cientos educativos de los pueblos de la comarca de pinares”. El informe Pisa revela pr que todos nuestros alumnos reciben una educación sobresaliente y una preparación magistral para alcanzar el éxito en todos los ámbitos de su vida personal y laboral”, finaliza María José Martínez Martínez