Una familia unida es invencible. Y lo es porque los lazos que se tejen son tan fuertes como el acero y tan resistentes como el amor. Una familia unida sabe hacer frente a las adversidades. Y lo hace con una sonrisa y con la confianza en que el futuro traerá vientos más favorables y muchos más días de sol. La familia es el pilar de nuestras vidas. Es ese cielo abierto que nos sonríe después de vivir algunas de las peores tormentas. La familia siempre es un refugio seguro. Y más en los días de invierno donde el frío y la soledad lo inundan todo. La familia es el agua en el desierto y el alimento cuando apenas queda nada para comer. Tal vez por eso la familia Hermanos Alcázar Pascuas ha sabido navegar empresarialmente mares de incertidumbre para llegar a una playa tranquila y favorable.
Fue José María Alcázar Pascuas quien decidió en el año 1995 comprar un camión y empezar a realizar todo tipo de transportes. Su tenacidad, determinación y confianza fueron asentando un proyecto humilde los primeros años, pero lleno de ilusión. Porque emprender es un camino no siempre bien iluminado. Un camino a veces lleno de piedras y de barro que hay que recorrer al principio en soledad. Sin embargo, el proyecto se fue asentando gracias a una idea empresarial sólida y la confianza de los primeros clientes en un proyecto serio e innovador. “Mi hermano Miguel Ángel entró en la empresa dos años después. Estábamos creciendo y veíamos la necesidad de ampliar plantilla y también infraestructura. Mari Carmen entró poco después para encargarse de la contabilidad y David al final también se unió a nuestro proyecto, explicó Chema Alcázar.
Albert Einstein solía decir que hay una fuerza motriz mucho más poderosa e importante que el vapor, la electricidad o la energía atómica. Esa fuerza es la voluntad. Tal vez por eso la empresa Hermanos Alcázar Pascuas tenga actualmente una nave de 1000 metros cuadrados en la localidad soriana de Navaleno. Además, cuentan en la actualidad con una flota de veinte camiones de marcas tan prestigiosas como Mercedes, Scania y Daf y transportan mercancía a nivel nacional y también internacional. Sus principales clientes en Europa están en países tan avanzados e importantes como Alemania, Bélgica y Holanda. Es curioso, pero en España apenas trabajan en Soria y si lo hacen en mercados tan innovadores como el del País Vasco, la provincia de Burgos y también el de Cataluña. “Lo cierto es que trabajar en esos mercados internacionales también tiene sus complicaciones. Y es que nos cuesta mucho encontrar en la actualidad buenos profesionales que quieran cubrir esas rutas a nivel europeo. Por eso nos hemos visto en la obligación de contratar chóferes del País Vasco y eso nos lleva también a trabajar desde allí”.
En la actualidad, la estrategia empresarial pasa por asentar la compañía y seguir trabajando de forma honesta y profesional. Chema reconoce la importancia que tiene hablar idiomas para que todo funcione correctamente. El inglés sigue siendo la llave en cualquier país del mundo y lógicamente de la Comunidad Económico-europea. “Defenderse en inglés hoy en día es esencial. Sin ese idioma no vas a ningún lado. A nosotros nos ha abierto las puertas de un gran número de mercados en Europa. Además, también hay que tener en cuenta la manera de trabajar que tienen en otros lugares del continente. En Alemania, Francia o Bélgica pagan religiosamente cada treinta o sesenta días y en España los plazos se dilatan hasta los ciento veinte días. Esa forma de trabajar es arriesgada para nosotros porque si nos surge cualquier problema financiero no podemos contar en ese dinero”.
En la actualidad, el sector del transporte representa el 2,3 por ciento del PIB nacional. Estamos hablando de datos recogidos y presentados por el Observatorio del Transporte y la Logística en España. Y es que el 94% de las mercancías se transportan mediante la modalidad de transporte terrestre y más concretamente por carretera. En los últimos años se ha observado que el carburante y los peajes han sufrido una fuerte subida de precio. Estamos hablando de una situación que ha complicado mucho la supervivencia de muchas pequeñas empresas por un incremento considerable en los costes de explotación. “La subida del carburante es un tema que nos afecta lógicamente. Por eso nosotros establecemos siempre un contrato con nuestros clientes que determina una subida proporcional de los portes si hay un incremento del combustible”.
En positivo si se puede decir que el sector del transporte ha experimentado una enorme transformación digital. Y es que cada vez son más las empresas que optan por incorporar en sus activos nuevas tecnologías y softwares que les permitan mejorar su rendimiento en el sector. Así se han ido añadiendo sistemas de geoposicionamiento y navegación que permiten a los transportistas de camiones conocer el estado del tráfico y las posibles incidencias en la carretera, algo que ayuda a anticiparse a estas situaciones y adaptar las rutas.
El pueblo es el hogar del alma y de los recuerdos. Es como un baúl donde uno guarda las piedras preciosas de su vida. Un baúl mágico que sirve para rescatar los recuerdos del pasado para hacer que respiren y vivan en el presente. Navaleno es para los hermanos Alcázar Pascuas un hogar maravilloso en el que se sienten seguros y queridos. Sin embargo, en plena lucha por combatir la despoblación en España, Navaleno es un pueblo que se debate por conquistar su futuro y su supervivencia. Tal vez por eso es realmente importante contar historias de superación personal y profesional. Historias tan estimulantes como la de la familia Alcázar Pascuas. Una compañía ejemplar que cuenta en la actualidad con 24 empleados y que es un homenaje a sus padres
Andrés y Carmen. Una empresa de pueblo que ha sabido crecer a lo largo de los últimos 25 años haciendo frente a momentos de incertidumbre económica y social. “Los comienzos no fueron sencillos. Supimos sobreponernos a la crisis económica. Es más, aquella etapa fue buena para la empresa. Y ahora con tesón, esfuerzo, sacrificio y profesionalidad estamos avanzando en el camino que realmente queremos seguir. Si que es cierto que como emprendedores de un pueblo pequeño nos hemos visto muchas veces abandonados. Apenas tenemos apoyo y creemos que los pueblos necesitan de un gran empujón para que emprendedores y empresarios los puedan sacar adelante”.
