jueves. 21.11.2024
señalbarbadillo
Fachada de Barbadillo con la señal de no aparcar camiones.

La imagen de Barbadillo del Mercado no es la misma sin el funcionamiento del Hotel Doña Lambra, con unas instalaciones amplias y buen servicio tanto hotelero como de restauración, a orillas de l carretera nacional 234.
El encargado de su gestión, Raúl García, no oculta su malestar por haberse visto obligado al cierre tras la colocación de las señales por parte del Ayuntamiento, en  las que se prohíbe el estacionamiento de camiones con un peso mayor de 16 toneladas en todo el casco urbano, excepto en la zona de la báscula. El propietario de la finca ya anunciado su inminente puesta a la venta, y el inicio de acciones judiciales contra el Consistorio.
García considera que esta medida ha sido fatal para poder mantener el negocio, ya que la llegada de camioneros supone un ingreso considerable durante todo el año. En un escrito colocado en la entrada del Hotel ahora cerrado culpa del “abandono de la explotación” a “la nueva normativa de aparcamiento del Ayuntamiento y a las quejas de algunos vecinos de la población”. Con el cierre se quedan sin trabajo ocho personas, según datos del empresario.
Para García, la colocación de las señales ha tenido un claro “fin electoral”, para conseguir votos en los últimos comicios municipales. El alcalde de Barbadillo, José Antonio Sancho, no coincide con las opiniones del empresario y recuerda que en el Ayuntamiento, “e incluso en mi casa”, ha recogido continuas quejas de vecinos  por los ruidos causados por los vehículos a motor.
El primer edil ha recordado que la nueva normativa ya fue aprobada en el mes de enero y que ha entrado en vigor tras todo el proceso que ha incluido la exposición pública “y no ha recibido ninguna alegación”. Para Sancho, no es cierto que en la actualidad no puedan aparcar los camiones, ya que hay zonas como la báscula y la travesía en las que está permitido el aparcamiento y, en total, según sus cifras “pueden aparcar hasta veinte camiones”.
José Antonio Sancho considera que los vecinos han refrendado con sus votos la actuación municipal ya que “nuestro grupo ha obtenido toda la representación en el Ayuntamiento”. Para el alcalde, el cierre viene motivado por otras razones entre las que apunta que “cada vez en el pueblo iba menos gente al hotel, principalmente la gente joven”.
Raúl García quiere llegar hasta el final contra una medida que considera injusta, y que daña de forma grave sus ingresos económicas “y que deja sin trabajo hasta ocho personas”. Recuerda el encargado de la gestión el nombre que le ha dado el Hotel a Barbadillo, y  que, gracias al Doña Lambra, el pueblo ha logrado salir en los medios de comunicación. García está dispuesto a llegar hasta el final, y recurrirá la medida  “donde sea necesario”.

Malestar por el cierre del Hotel Doña Lambra que deja sin trabajo a ocho personas y...